Instituto Cardiovascular del Cesar
El Instituto Cardiovascular del Cesar es una organización de naturaleza privada, que brinda servicios de mediana y alta complejidad; para ello dispone de una infraestructura moderna, confortable, segura, respaldada por una gran calidad científica y tecnológica, promoviendo la docencia e investigación
MISIÓN
Nuestro proceso de atención se consolida bajo parámetros evaluativos del mejoramiento continuo, un servicio humanizado y cálido, en donde se estimula la práctica médica bajo evidencia científica y enfocado en la gestión del riesgo en salud, lo que nos permite consolidar una cultura de seguridad, edificada en torno al respeto de los derechos y deberes del paciente y su familia, como corresponsables del restablecimiento y mantenimiento de la salud.
VISIÓN
Para el año 2028, el Instituto Cardiovascular del Cesar será una institución acreditada, reconocida como un centro de excelencia científica en la región caribe, y referente en la atención de pacientes con enfermedades cardio-cerebrovasculares, adultos y pediátricos, consolidándose a nivel local como la mejor institución de alta complejidad, apoyándose en docencia e investigación.
Valores Corporativos
- Trato Humano
- Compromiso
- Excelencia Científica
- Trabajo en Equipo
- Respeto
Objetivos Institucionales
- Garantizar la satisfacción del cliente
- Garantizar la oportunidad en la prestación del servicio
- Brindar un servicio amable en un ambiente cálido
- Garantizar la accesibilidad en la prestación de sus servicios
- Cumplir los requisitos que garanticen seguridad en la prestación del servicio
- Evaluar y mejorar las competencias del Talento Humano
- Garantizar la comodidad de nuestros clientes
- Contar con un óptimo clima organizacional
- Realizar compras a proveedores confiables
Política de Calidad
Nuestro proceso de atención se consolida bajo parámetros evaluativos del mejoramiento continuo, un servicio humanizado y cálido, en donde se estimula la práctica médica bajo evidencia científica y enfocado en la gestión del riesgo en salud, lo que nos permite consolidar una cultura de seguridad, edificada en torno al respeto de los derechos y deberes del paciente y su familia, como corresponsables del restablecimiento y mantenimiento de la salud.